El perdón es tema de todos los tiempos y con mayor razón, en esta Nueva Era.

Para perdonar, es importante comprender que cada ser humano que encontramos en la vida, es un apoyo que el universo nos brinda, para vernos como espejos en ellos y ver nuestros propios miedos y nuestras virtudes.

De hecho, no podríamos reconocer la bondad o la envidia en otros sin haberlo experimentado primero. O sea, que lo que hacemos realmente, es reconocernos a través de los demás. Por ello, al entrar en conflicto con alguien, lo más recomendable es hacernos las siguientes preguntas:

¿Que tengo que aprender de esa persona o situación?                                                      ¿Que me molesta de ello?                              ¿Qué gano al mantenerme en conflicto con ello?                                                           ¿En que área de mi vida estoy manifestando lo que me disgusta de esa persona o situación?                                       Estas preguntas o proceso de autoindagación nos lleva a profundizar más en nuestros sentimientos y en nuestras motivaciones.                                  Entramos en conflicto cuando estamos en desacuerdo con algo, cuando creemos tener la razón.  El tener la razón puede ser la "compensación" del conflicto, es decir,  lo que sentimos que ganamos con ello.  Otras compensaciones que podrían estar involucradas, se relacionan con el hecho de tener el poder y la manipulación de los demás, con la evasión de nuestros propios sentimientos, entre otras.  Pero principalmente radica, en que no asumimos nuestra responsabilidad en el  hecho.

 Para entender un poco el significado de "responsabilizarse", es importante saber que existen leyes universales como la de atracción, según la cual, atraemos a nuestra vida todo lo que pensamos. 

Por lo tanto, si soy una persona que piensa y cree que la vida es una lucha, atraeré situaciones difíciles, en las cuales tenga que luchar para lograr lo que quiero.   

                    Con esto también asumimos que nuestra mente tiene un poder creador y que las emociones dependen de los esquemas de pensamientos, por lo tanto, tomemos responsabilidad de los resultados que obtenemos en nuestra vida.                                                              La idea es liberar a otros de lo que nos sucede y comprender que detrás de todo hay un aprendizaje y que la otra persona es sólo un canal para mostrarnos algo y crecer.  Con esto salimos de nuestro papel de víctima, nos abrimos a ver con claridad la situación y asumir nuestra responsabilidad en los hechos.                    Busquemos las razones que tenemos para no perdonar al otro y encontraremos las barreras que nos alejan del amor y nos atan al juicio y a la posición de víctimas.    Veremos nuestras limitaciones para amar, comprender y tolerar, lo que nos impide tener paz en nuestro corazón y armonía con el Universo.                                    

Cada persona actúa con un esquema de pensamiento o programa  como un computador, que puede traer de vidas pasadas, cuyas almas requieren sanar, por lo tanto, nosotros podemos elegir por voluntad propia, cambiar nuestros esquemas,  para crecer, evolucionar y ser felices.  

Esta decisión depende de ti y comienza por perdonarte  y amarte a ti primero, luego,

 "AMAR A TU PRÓJIMO COMO A TI MISMO"

Extracto del taller:

"TERAPIAS HOLÍSTICAS CON LOS ÁNGELES"

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      Fanny Carrasco Zañartu   

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